Blog

logo

Problemas emocionales y de comportamiento en pacientes con Daño Cerebral Adquirido

Razones del cambio tras un Daño Cerebral Adquirido

Una de las consecuencias más comunes del daño cerebral adquirido es sufrir cambios de personalidad y conductuales. La familia, amigos y personas próximas al paciente son las primeras en darse cuenta de estos cambios, ya que incide de manera directa en la manera de relacionarse con ellos.

Las razones por las que el carácter de una persona que ha sufrido una lesión cerebral cambia puede estar relacionado con la complejidad de esta nueva situación, pero también puede deberse al propio daño neurológico.

Cambios de conducta más comunes tras un daño neurológico

Los cambios de conductas inherentes al daño neurológico dependerán de la zona lesionada y la gravedad de la lesión. Las alteraciones más comunes suelen ser las siguientes:

  • Impulsividad. Las personas con daño cerebral adquirido pueden ser impulsivas y cometer más errores que antes a la hora de reaccionar. Esto es importante sobre todo en situaciones que representan peligrosidad como por ejemplo el cuidado de niños, conducir o la resolución de conflictos.
  • Labilidad emocional. Hablamos de labilidad emociona cuando la persona se emociona con facilidad o le cuesta ajustar sus emociones al contexto. Es típico que llore ante noticias que antes no lo hacía, por ejemplo. También puede suceder que la reacción no está ajustada al contexto o que exista una fluctuación de emociones en breve espacio de tiempo.
  • Anosognosia. Esta expresión hace referencia a cuando la persona que ha sufrido la lesión no es consciente del alcance del daño y actúa creyendo que es capaz de caminar, comer solo o razonar como antes.
  • Desinhibición o conducta inapropiada. A veces sucede que la persona hace comentarios inapropiados o tiene una conducta sexual inapropiada. Generalmente, existen problemas para inhibir la conducta y las consecuencias de esta actitud dejan de ser tan importantes como antes. Trabajar en ello es necesario para evitar situaciones desagradables.
  • Egocentrismo. Puede que la capacidad para empatizar se haya visto mermada, por lo que les costará más hacer cosas por los demás. Normalmente quieren imponer su criterio, importando únicamente la opinión que ellos tienen.
  • Depresión y ansiedad. Puede ser inherente a la lesión, o puede que sea motivado por la gravedad la situación que está viviendo. Independientemente del motivo se trata de una consecuencia importante que ha de ser tenida en cuenta desde el principio.

La complejidad de adaptarse a las consecuencias de una lesión cerebral

Cuando una persona sufre un daño cerebral adquirido, su vida cambia de forma muy importante. Adaptarse a esta nueva etapa no es una tarea sencilla, sobre todo cuando te toca aceptar que tu proyecto de vida ya no puede ser el mismo y de serlo, que costará mucho más que antes.

Los cambios físicos, cognitivos y sociales afectan al paciente y su entorno familiar más cercano, y este fenómeno provoca de manera irremediable emociones negativas como la tristeza, la ira o el miedo.

Aceptar la nueva situación y reconstruir un futuro, será posible gracias al apoyo del entorno social, familiar, equipo médico y terapéutico del paciente, sin olvidarnos claro está del propio paciente, quien necesitará el apoyo de todos nosotros para reunir la fuerza necesaria y salir adelante después de esta difícil etapa.

Destacados

JORNADA EXPERIMENTAL NEURAL INTENSIVE MADRID

No te pierdas nada

Suscríbete a nuestra newsletter para estar al día en las últimas novedades y noticias

Categorías

Noticias

Artículos y noticias que
podrían interesarte